La facilidad que tenemos para ver mails en iPhones, móviles, tablets y ordenadores y el ingente número de mensajes recibidos está haciendo que dediquemos al mail demasiado tiempo y energía. El e-mail es un tipo singular de comunicación que traslada la carga a los que reciben los mensajes. Por eso Samuel propone que la carga corresponda más bien para quienes los envían. La comunicación y la relevancia dependen del emisor y la urgencia del mensaje.
En cualquier caso, es más importante mandar los mensajes que debes mandar que contestar todos los mensajes que te llegan. Si este mensaje te llega por mail, no te sientas obligado a responder...aunque agradecemos mucho los comentarios.
MÁS EN:
http://blogs.hbr.org/samuel/2011/02/its-time-for-a-vendetta-agains.html
Ja, ja, ja!
ResponderEliminarMe apunto a no contestar mails, Quico!
De momento, llevo unas semanas limitando el tiempo que le dedico a ello...
José
¡Gracias por el mensaje!
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