En él, Daniel Buysse y su equipo, de la Universidad de Pittsburgh, ofrecen unos pocos consejos para que el sueño sea más efectivo, centrados en modificar comportamientos en vez de consumir pastillas, y que se resumen en cuatro reglas:
- Reduce el tiempo que pasas en la cama.
- Levántate a la misma hora todos los días.
- No te acuestes hasta que no tengas sueño.
- No te quedes en la cama si no estás durmiendo.
Unas prácticas que aparentemente sencillas y que, según los autores, mejoran el sueño en el 75% de los casos, de paso que garantizan un vida más sana y productiva.
Porque, aunque la genialidad se asocia con frecuencia a nocturnidad, lo cierto es que sin descanso no hay creatividad; y conseguir un sueño reparador es vital para dar con buenas ideas.
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Oye, un post muy pertinente. Ya se sabe, a más trabajo, más descanso. ¡Muy adecuado a este blog! Quico
ResponderEliminarGracias, Quico! Me gustó en su día, aunque sólo sea por confirmar que la ciencia valida el sentido común; aunque no sé si es algo realmente aplicable...
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