Además de
Kesselskramer,
180,
SidLee,
Wieden&Kennedy... otra conocida agencia holandesa,
BSUR, acaba de hacerse con la cuenta internacional de Mini: un caso más de agencias pequeñas, creativas, internacionales y con sede en Amsterdam, que consiguen trabajar para clientes que hasta hace poco estaban reservados sólo a las grandes multinacionales, ¿se están diluyendo las barreras de entrada? ¿pueden las agencias pequeñas trabajar ahora para clientes grandes?
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