Los social media no son una panacea ni sirven para todo. Son un apoyo excelente: generan engagement, facilitan la difusión de vídeos, ayudan a conversar con las audiencias, a mantener la ilusión de los fans, etc. Pero, desde luego, no son el único medio para vender y no pueden ser el eje de la estrategia de comunicación. Son "plazas públicas" que forman parte del contexto mediático junto a otros medios, pero nada más (y nada menos).
Estamos convencidos del valor de las redes sociales. Pero ahora ya sabemos que no pueden resolver todos los problemas de la comunicación y que es necesario darles contenido y mejorar las herramientas de evaluación.
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