La reciente desaparición de Toy, una de las agencias más creativas y prometedoras de New York, esta dando mucho que hablar en la red. Principalmente por lo inesperado de su cierre y, también, por las dudas que está generando en torno a su modelo de negocio: agencia pequeña, creativa, fundada hace 4 años por tres ex-publicitarios de Fallon Advertising... La ausencia de cuentas fijas y la necesidad de trabajar por proyectos, el exceso de trabajo, y su filosofía de over-servicing a los clientes puede estar en la base de su falta de rentabilidad, que dió origen al cierre. Un nuevo aviso de que, para sobrevivir, no basta con ser creativo.
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